Programa completo de festividad, procesiones e itinerarios de Semana Santa de Tarifa 2023. Inicio el domingo 2 de Abril hasta el día 9.
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Verano en Tarifa
Los misterios del gaditano viento de Levante
Los misterios del gaditano viento de Levante
Durante 165 días de media al año la provincia de Cádiz está expuesta al azote del viento de Levante.
Una muestra de la importancia del viento en nuestras vidas es que los más frecuentes tienen nombre propio. Nada más oír hablar de Alisios, Gallego, Garbí, Lebeche, Cierzo o Tramontana, entre otros, sabemos qué hacemos referencia a un viento intenso que tiene una dirección preponderante. Los meteorólogos denotamos la dirección del viento con el punto cardinal del que proviene. En el caso de Cádiz, los vientos dominantes son el Levante y su inseparable compañero, el Poniente. El Levante recibe su nombre debido a que es un viento de componente Este, donde el sol levanta cada mañana. De modo análogo, el Poniente recibe su nombre porque el ocaso siempre tiene lugar en el Oeste.
Si hay un lugar famoso en España por el viento es Cádiz. Su situación geográfica favorece un régimen de vientos muy especial. El viento en esta provincia no solo influye en las actividades humanas, sino que también rige los movimientos migratorios de las aves entre Europa y África. También los vientos modelan la orografía de las impresionantes playas gaditanas, donde se puede encontrar la mayor duna de España, en Punta Paloma.

El Levante es muy intenso, ya que produce vientos medios sostenidos de 50 kilómetros por horas y rachas que pueden superar los 110 kilómetros por hora. Además, los periodos de viento de Levante, popularmente conocidos como levanteras, pueden llegar a durar de siete a diez días consecutivos, siendo más frecuentes en los meses entre mayo y agosto.
Pero, ¿qué produce este peculiar viento? Estos vientos son generados por dos situaciones meteorológicas diferentes. Una de ellas está relacionada con la situación general meteorológica que afecta a toda la Península. Estos Levantes suelen dar lugar a vientos fuertes más allá del Estrecho, afectando a otras provincias mediterráneas y adentrándose en el Atlántico. La otra configuración meteorológica es más local, y solo afecta al área del Estrecho, siendo esta la más frecuente en verano.

La explicación tradicional de que la aceleración del Levante en el Estrecho es debida al efecto Venturi no es consistente. El efecto Venturi establece que si un flujo se estrecha, el fluido ha de acelerarse, como por ejemplo cuando apretamos el borde de una manguera para que el agua llegue más lejos. Si el efecto Venturi fuese el responsable de la fuerza del Levante, los máximos de viento deberían de darse en la parte más cercana entre España y Marruecos, y esto no sucede.
La explicación más plausible sobre el origen del Levante está relacionada con un efecto tridimensional debido a la orografía escarpada a ambos lados del Estrecho. Las montañas producen un bloqueo del viento a niveles bajos y una canalización en la zona más baja sobre el mar, dando lugar a patrones de viento más fuertes en la salida del Estrecho.
La peculiar orografía que configura el estrecho paso entre el mar de Alborán y el océano Atlántico dan lugar al Levante, un viento que en Cádiz también es fuente de diversión. Tarifa y sus alrededores están entre los mejores lugares del mundo para disfrutar de actividades deportivas relacionadas con el viento.
El hombre y el viento

El hombre se ha servido del viento desde antaño. Conocer sus secretos ha sido fundamental para el funcionamiento de cualquier sociedad. Hasta principios del siglo XIX, con la llegada de los barcos de vapor, el viento era la mejor fuerza motriz para realizar desplazamientos de personas y bienes. También los grandes veleros eran usados en las guerras, como en la batalla que acaeció en las cercanías del tómbolo de Trafalgar, en 1805. El viento débil fue fundamental en la derrota de la Armada francoespañola en aguas gaditanas, ya que impidió maniobrar rápidamente a los grandes navíos dejándolos a merced de la flota británica.
Lejos del mar, el viento fue utilizado desde antaño para moler grano o extraer agua, como los famosos polders holandeses. Los viejos molinos han dado paso, en muchos lugares, a enormes aerogeneradores, siendo el viento una de las mayores fuentes de energía renovables. En la provincia de Cádiz, hay 73 parques eólicos. Generan una potencia que ronda los 1.400 megavatios, lo que supera la potencia generada por cualquiera de las centrales nucleares españolas.
Txt ref: EL PAÍS. DANIEL SANTOS MUÑOZ
1ª Ruta Alcornocales
1ª Ruta Alcornocales
Conoce el Parque Natural de los Alcornocales
Se extiende desde la sierra hasta el joven Parque Natural del Estrecho, presentando gran diversidad de relieves y paisajes. Esta riqueza se refleja en todos los ámbitos: flora, fauna, climatología, historia y folklore, constituyendo un lugar ideal para visitar y disfrutar de actividades tan diversas como la recolección de setas y la práctica de deportes en la naturaleza.
El principal responsable de esta riqueza es el agua, presente en numerosos ríos, arroyos y embalses que, además de abastecer a la provincia, son aptos para la pesca y actividades recreativas. Pero sobre todo destaca la humedad proveniente de la costa, que se acumula formando bosques de niebla en valles estrechos y profundos denominados canutos. En estas condiciones se conserva una flora muy singular, perteneciente a la Era Terciaria, la Laurisilva. Se caracteriza por hojas lisas y brillantes, que aprovechan la humedad y escasa luz que dejan pasar los árboles que bordean los canutos. Así, entre el aroma del laurel, la belleza del ojaranzo en flor, elegantes durillos y acebos, se caminará por esta especie de selva, en compañía de los sonidos del mirlo acuático, el hábil martín pescador y las currucas o pinzones, que se esconden entre los helechos.
Los suelos de arenisca, que han favorecido el denso alcornocal, también albergan quejigos y roble andaluz en las zonas más húmedas. En estos bosquetes cazan las águilas calzadas, culebreras y ratoneras, además de azores, gavilanes y cárabos. En las alturas, asoman las rocas y sobre el suelo pobre aparece la herriza, denso matorral achaparrado de distintas especies adaptadas a suelos ricos en metales como el aluminio, entre las que abundan, por ejemplo, las aromáticas. En este espacio habitan la cabra montés y numerosas aves rapaces, destacando el buitre leonado, alimoche, águila perdicera, búho real y halcón peregrino.
En las zonas bajas y arcillosas aparece el acebuchal aclarado desde tiempos inmemoriales para dejar paso al pasto que alimentará el ganado típico de la zona, la vaca retinta. En las laderas, aparece el matorral mediterráneo, con jaras, brezos, cantuesos, torviscos y majuelos. Por ellos discurre el corzo morisco, autóctono y emblema de caza mayor, además del gamo, ciervo y carnívoros como ginetas, tejones y sobre todo meloncillos, con la mayor población de la península.
En un Parque tan completo y diverso, caben otras actividades, que van del montañismo en el pico del Aljibe o el Picacho; la espeleología en el enclave Ramblazo-Motillas, o el descenso de cañones en La Garganta de Buitreras, una de las pocas áreas preparadas para esta práctica de riesgo y que por su singularidad ha sido declarada Monumento Natural. Para los más tradicionales se recomiendan las rutas a caballo, como las establecidas en La Almoraima
Antes de descubriros algunas de estas rutas, haremos un repaso de lo que esconde nuestro parque.
Flora
En el Parque Natural Los Alcornocales se agrupa un conjunto de sierras donde se desarrolla, en excelente estado de conservación, el mayor alcornocal de la Península Ibérica y uno de los más importantes del mundo.

El alcornoque, árbol de carácter mediterráneo, es uno de los elementos más representativos del Parque.
Excepcionales bosques en galería, formados por especies subtropicales ausentes del continente europeo, se localizan en los denominados “canutos”, valles profundos y estrechos excavados por los ríos, poblados por laurel, rododendro, avellanillo, durillo, aliso, acompañados por acebo y ejemplares de helechos poco comunes en nuestros bosques. Los alcornocales, en ocasiones, se mezclan con acebuches, quejigos, robles melojos… dependiendo de las condiciones de humedad y del tipo de sustrato. Su matorral está constituido por lentiscos, jaras, brezos, cantuesos, torviscos y majuelos, entre otras especies típicas del clima mediterráneo.
Fauna
La diversidad de ecosistemas presentes en el Parque Natural, junto a la situación geográfica tan peculiar en la cercanía del Estrecho, paso obligado de las aves en sus migraciones anuales, sientan las bases determinantes para explicar la riqueza y diversidad faunística de este espacio. Hasta 18 tipos de aves rapaces y un buen número de pequeños pájaros surcan sus cielos o se cobijan en sus tajos. Serán los anfibios y reptiles, la mitad de los que contabiliza la Península Ibérica, y 11 tipos de murciélagos ocultos en sus grutas los que también tengan gran protagonismo. Mientras que las cumbres son territorio de la cabra montés, los bosques participan de la presencia del corzo morisco, su duende, que comparte hábitat con ginetas, tejones y meloncillos.

Recursos y aprovechamiento del Parque Natural
El Parque cuenta con una relevante cantidad de recursos tanto naturales como de patrimonio histórico. La existencia de estos recursos ha permitido tradicionalmente el desarrollo de distintas actividades económicas, como las silvícolas, recolectivas, ganaderas o cinegéticas que explican que la presencia humana en la zona haya sido muy notable desde tiempos prehistóricos.
El aprovechamiento tradicional por excelencia de los recursos del Parque Natural lo constituye la extracción de corcho. Se estima que en la zona se producen 26.000 Tm de corcho húmedo al año.
Su uso estuvo relacionado desde antaño con la artesanía comarcal (elaboración de colmenas, raseras etc.), y no es hasta el segundo tercio del pasado siglo cuando comienza su extracción intensiva y planificada, la cual vino motivada por la demanda de la industria vitivinícola.
Descorche es el nombre que reciben las operaciones necesarias para la extracción del corcho, las cuales se llevan a cabo desde el mes de junio hasta mediados de agosto.

Además en el área existen gran cantidad de zonas aptas para la explotación ganadera. Entre las razas existentes en el parque destaca la vaca retinta, raza autóctona perfectamente adaptada a la zona y cuya puesta en valor puede ser interesante. También existen algunas ganaderías de toros de lidia.

Aunque estos son los recursos más importantes existen otros destacables como la obtención de leña y el aprovechamiento de las piñas cuyo fruto, el piñón, está tan valorado en confitería y cuya exportación a Italia y Estados Unidos supone una fuente de ingresos importante.
Existe también una actividad importante entorno a la apicultura, al aprovechamiento del brezo y de las setas, siendo esta última una de las actividades más novedosas de la zona. Por último destacaremos la recolección de plantas aromáticas y medicinales destinadas al consumo gastronómico como el laurel o el orégano; recolección de productos silvestres como espárragos, tagarninas, caracoles, higos, entre otros.

Rutas, caminos y senderos
Dentro del parque se pueden descubrir muchos parajes, cercanos a Tarifa, donde por ejemplo existen “El Bosque de la Niebla”, “El Río de la Miel” o “La Garganta del Capitán” como “lugares estrella” donde además, podremos encontrar alguna “pocita” para darnos un refrescante baño o ya para esto esperarnos para realizarlo en las cercanas aguas del “Estrecho de Gibraltar”.
El “Parque Natural de Los Alcornocales” también ofrece muchos aspectos etnográficos, en esta época del verano entrante, podemos encontrar “El Descorche” o ya entrando el otoño, primero “La Berrea” continuando con otras joyas de parque como son las setas y las “Jornadas Micológicas” que se desarrollan en temporada.
A lo largo de varios meses iremos descubriendo de la mano de Mundo Posibilidades diferentes rutas, adaptadas para todo tipo de actividades y edades, está en vuestra mano decidir cuál!
En Junio os hablaremos de un sendero precioso; “El sendero Del Bosque de la Niebla”.
El Bosque de la Niebla es uno de los lugares en esencia más interesantes y curioso para realizar senderismo en el Parque Natural de Los Alcornocales…
Nuestro recorrido se adentra en los umbríos bosques de la sierras de Algeciras y Tarifa, único bosque de Laurisilva del sur peninsular donde se encuentran formaciones forestales únicas de especies subtropicales.
Al sendero se accede por del Área Recreativa El Bujeo desde donde comenzaremos este Sendero.
El primer tramo nos dirigirá también al posible Sendero del Río Guadalmesí, pero hoy buscamos unas Sensaciones a mayor Altitud.
Ascenderemos por “El Bosque de la Niebla”, completísimo Lugar con Esencia totalmente recomendable para toda la familia donde una de las frases más escuchada es… -“Parece un Bosque de hadas y duendes”.
A medida que vayamos caminando, nos iremos introduciendo en un extraño quejigal de quejigos enanos que es la mejor representación del bosque de niebla, característico de esta zona, constituyendo una de las mayores manchas forestales de la Península Ibérica. Los Bosques de niebla que dan nombre a esta ruta además de esos quejigos enanos está formado por el bosque de laurisilva, Rododendros (ojaranzos), avellanillos, laureles, durillos, acebos, helechos subtropicales, y otras muchas especies de menor interés.
Al llegar próximos a la carretera nacional nos dirigimos a nuestro punto de partida en El Pelayo paralelos a la carretera por una zona de menor importancia botánica.
Más adelante, cogeremos una bifurcación que nos llevará por una Vereda donde sentiremos el Senderismo en su máximo apogeo entre Alcornoques y con el acompañamiento sonoro que ofrece el citado Río Guadalmesí en su vertiente superior o los cánticos de los pájaros que habita la zona.
Un bonito Sendero que ascenderemos con tranquilidad para disfrutar y poder embriagarnos en la naturaleza reinante en este punto del Parque Natural de Los Alcornocales a la vez que no se duda que “conectaremos” con “La Madre Tierra”.
No dudéis que esta, es una Completa Visita con Sustancia donde nos esperan como Lugares con Esencia como el Bosque de la Niebla con sus Arboles envueltos en Musgo donde podremos incluso imaginar que agustito vivirían incluso los Gnomos, Hadas o Ninfas y donde seguro encontraremos las Sensaciones que hace tiempo parecieron olvidadas.

Continuando el Sendero, comenzaremos el descenso por el “Puerto del Viento” que nos deleitará esta parte del senderismo por el Parque Natural de Los Alcornocales con “los pinos tumbados al viento”. No dudo que una vez más, volveremos a cruzarnos con varios animales que pastarán plácidamente por la zona mientras nos dirigimos hacia nuestro punto de partida para concluir nuestro paseo
Llegamos ya a la “Zona del Bujeo” dando por finalizado este Sendero donde sentiremos haber Aprovechado de una Manera Diferente Nuestro Tiempo Libre.

Para nuestros socios; En nuestra sección de El Estrecho encontrareis la agenda que propone Mundo Posibilidades para Julio y una oferta exclusiva para nuestros Socios para quienes deseéis ir descubriendo poco a poco todo lo que esconde nuestro Parque (los socios del Club de la Conservera podrán benificiarse de un 20% de descuento). Ir a la entrada
Bibliografía
Mundo Posibilidades
Dir. Reg. Parque de los Alcornocales
Junta De Andalucía
Ayunt. De los Barrios
Tarifa. Historia y emplazamiento
Tarifa: su historia y emplazamiento
La historia de Tarifa tiene que ver mucho con su emplazamiento geográfico. La ciudad comienza con las primeras llegadas de los íberos, los fenicios, los griegos y los cartagineses, grandes comerciantes todos ellos, que vieron este lugar y su situación geográfica un punto fundamental y un hábitat privilegiado.
Punta Marroquí, es un promontorio situado en el extremo suroeste de la isla de las Palomas o Isla de Tarifa, constituye el punto más meridional de la Europa continental (36º de latitud norte y 5º 34′ de longitud oeste), además de ser la divisoria geográfica entre el Océano Atlántico y el Mar Mediterráneo, allí está construido el faro de Punta de Tarifa.
La isla de las Palomas es una de las imágenes más representativas de Tarifa.
El emblemático camino que recorre el espigón hace de división geográfica entre el Mediterráneo y el Atlántico. Pocos sitios en el mundo nos ubican en un lugar tan singular, mar y océano, Occidente y Oriente, un Estrecho que es paso de culturas y miles de especies marinas y avícolas. Puente de civilizaciones y bastión de Europa.
Antaño destacamento militar hoy en día reconvertido en lugar de bienvenida y acogimiento para esos hombres y mujeres que arriesgando sus vidas consiguen en 14 kilómetros de fuertes corrientes alcanzar el sueño europeo.
Se trata de una formación rocosa, con un perímetro de 1.850 metros, una superficie de 227.380 m2 y una cota sobre el nivel del mar de entre 8 y 10 metros.
A tan sólo 11 kilómetros de la costa africana, pasó de ser un lugar para las ofrendas rituales a los dioses de los fenicios y cartagineses, a convertirse en un sitio propicio para defender contra los ataques.
La primitiva entrada respondía a una zanja abierta en la roca y cubierta con una bóveda de ladrillo. Fue construida por los británicos entre 1812 y 1813 y nada tiene que ver con la actual que fue abierta hacia 1940.
Primariamente se utilizó como cantera para extraer la piedra con la que se construyó el emblemático castillo de Tarifa en el siglo X y las fortificaciones de Gibraltar.
La Torre Almenara fue su primera construcción y data del siglo XVI; Con 17 metros de altura y 10 de diámetro era custodiada por 3 guardas y un artillero con el objeto de garantizar la continuación de las fogatas ahumadas del este o el oeste, se convertiría en el punto de observación más avanzado de Tarifa sobre el mar y poder así avisar de los ataques sospechosos.
Fue durante el reinado de Carlos IV cuando se procedió a transformarla en el actual faro de Tarifa y colocarle un fanal que sirviera de guía al tráfico marítimo.
Encendido por vez primera en la noche del 30 de mayo de 1822.
Al oeste de la Isla se encontraba la Dársena de Poniente, actualmente conocida como “el Foso”. Se trataba de un desembarcadero que proporcionaba a los barcos locales resguardo de los temporales del suroeste pero que desde la década de 1940 se encuentra arruinada debido a los temporales que acumulaban arena constantemente.
Durante el reinado de Fernando VII, Antonio González Salmón construyó siete baterías. La batería “de Levante” o “de San Antonio” y la “de Guzmán el Bueno” o “de Poniente” son de la década de 1820, posteriormente mandó a construir el almacén de pólvora de San Fernando a más de 6 metros de profundidad, por lo que se encuentra casi oculto a la vista.
Su unión al continente tuvo lugar en 1808, obra de González Salmón, cuando se construyó la escollera de 769 metros que la une al continente con el objetivo principal de construir un dique que protegiera al fondeadero de levante de los temporales.
Desde entonces se han formado las playas que la flanquean, la Caleta al este y el inicio de Los Lances al oeste.
Con el paso de los años la utilidad de las fortificaciones de defensa del Estrecho fue decayendo por problemas de humedad. A partir de 1960 la Isla estuvo habitada por el Regimiento de Infantería, llegando en 1967 la Compañía de Operaciones Especiales (COE 21).
La Isla acogería a un total de 3.000 hombres y 500 mandos, lo que hizo necesario remodelar el interior para la práctica de los ejercicios de entrenamiento, como una pista de atletismo, un campo de fútbol, una galería de tiro y una pista para las clases de defensa personal. Posteriormente la COE 21 fue trasladada y la Isla se destinó a la instrucción de reclutas hasta el 2001 que se decretó la supresión del Servicio Militar Obligatorio. La Isla de Tarifa perdió así todo su interés militar.
En ese mismo año fue declarada Bien de Interés Cultural con la categoría de “Sitio Histórico”, lo que favorecería la protección de sus restos históricos y arqueológicos.
Poco tiempo después, las instalaciones se comenzaron a utilizar para alojar y dar un refugio temporal a los inmigrantes que sin suerte fueron interceptados al intentar cruzar las aguas del Estrecho de forma ilegal. Esta condición continúa actualmente, además de otras de carácter científico como la observación y estudio sobre la migración de aves marinas.
No sólo son los valores históricos los que han promovido la protección de la Isla de Tarifa. También radica su importancia en albergar poblaciones de especies vegetales endémicas, en sus paredes rocosas podremos encontrar una especie muy rara, el helecho Asplenium marinum, en peligro de extinción.
Otro encanto que posee la Isla son sus fondos marinos, únicos en el litoral gaditano. Los abundantes corales y gorgonias, junto a esponjas y ascidias forman un paraíso sumergido lleno de vida que nos indica la alta calidad que posee las aguas del Estrecho. La abundancia de peces que encuentran refugio y alimento en estos fondos como los congrios, morenas o sargos aumentan aún más la riqueza marina. Numerosos submarinistas vienen a bucear en sus proximidades, siendo uno de los alicientes el buceo entre los diversos pecios que naufragaron en sus proximidades, como el de Las Calderas al oeste o el de San Andrés al este, hundidos a finales del siglo XIX.
A pesar de que no podremos acceder al interior de la Isla, ver una puesta de sol desde la escollera no tiene precio y dicen los aficionados a la pesca que su punta es el mejor sitio de Tarifa para anclar la caña al amanecer.
* Fuente documentación: Revista Todotarifa
De Conil a Tarifa, Sol y Mar
De Conil a Tarifa
Quince lugares donde recuperar la magia ‘del Relax’ más andaluz y hacer turismo por Tarifa. Desde la localidad de Conil a Tarifa se pueden encontrar buenos precios, una naturaleza irresistible y restaurantes y chiringuitos donde triunfan los pescados.
Al sur del sur, de lo más sur de la península, existe una esquina donde el tiempo se alarga.
El tramo del final del mediterráneo y el océano Atlántico, entre Conil y Tarifa, ha sobrevivido lo mejor que ha podido a los años de implacable destrucción de la costa y todavía la naturaleza ha sido capaz de conservar su naturaleza vigorosa y una atmósfera tranquila y sin pretensiones.
Ya desde los años sesenta la zona era conocida por hippies de medio mundo, pero ahora modernos, ejecutivos y urbanitas estresados acuden a Cádiz a encontrar una paz que en sus ciudades se les niega. Pero ¿qué poder tiene esta zona de costa? ¿qué encontrar cuando se hace turismo por Tarifa?… Pues, aparte del poso de culturas milenarias, playas salvajes, una gastronomía que funde su huerta, el mar y la ganadería, tres parques naturales —el de La Breña, Los Alcornocales y el del Estrecho—, unos atardeceres que emocionan, olas para practicar surf, precios asequibles, el poder paranormal del viento de Levante y las montañas de Marruecos a 14 kilómetros. Os roponemos 15 paradas para disfrutar. Hay quien llama a la zona Cadizfornia en un símil con el Estado estadounidense del sol y el relax. Puede que el neologismo se le quede pequeño.
01. Hotel V (Vejer de la Frontera)
En medio de un laberíntico trazado de fachadas blancas fluorescentes, emerge el Hotel V de Vejer de la Frontera. Este pueblo encaramado en lo alto de un cerro y de profundos aires moriscos encandila al que lo visita. Se puede obtener una perspectiva distinta del caserío desde la terraza de este hotel boutique de 12 habitaciones: la iglesia, el castillo, la Laguna de La Janda, las playas de Los Caños de Meca y Marruecos. Una estampa idílica mientras uno se moja en eljacuzzi, desayuna o se toma una copa por la noche. El resto del hotel también tiene su punto. “Entre nosotros nunca lo llamamos hotel, sino la casa”, dice Oliva Reyes, una de las gerentes. “Éste es un entorno para desconectar y cuidamos al máximo los detalles, como la calidad de las sábanas”. O como la estancia del antiguo aljibe, reconvertida en sala de masaje. Detalles como ése enamoraron a Jean Van Gysel, el belga que compró la vivienda para construir el hotel, con cinco años de vida. Él no se deja caer mucho por Vejer porque vive en París. Le deja el placer a usted.
- Calle del Rosario, 11-13. 956 45 17 57. Vejer de la Frontera.
02. Prismáticos en mano
Contemplar las bandadas de miles de cigüeñas saliendo de Europa y llegando a África es un espectáculo. Es como ver una bola blanca enorme en el cielo. Rutas para avistar aves como éstas se pueden hacer de la mano de White Hawk Birding, una empresa cuyos tres socios viven en una parte distinta del mundo. Yeray Seminario está en Tarifa y organiza paseos a medida de los viajeros, pero él recomienda contemplar las migraciones desde finales de agosto. “El estrecho es uno de los puntos más importantes del mundo, junto con el Bósforo, Panamá y Veracruz. Y donde en otros lugares ves una decena de ejemplares, aquí te encuentras con miles”, sintetiza. Además de las cigüeñas, se ven sobrevolando el cielo rapaces como el águila culebrera, el halcón abejero, el milano negro o el gavilán. El visitante alucina también con los parajes de los parques naturales del Estrecho y de los Alcornocales, donde se pasa de las dunas a los bosques húmedos. Algunos de los puntos más relevantes son el Observatorio de Cazalla, cerca de Tarifa, y el sendero del Tiradero, para ver ya no migraciones, sino aves forestales como el buitre leonado y el alimoche. Por supuesto, hay que ir bien equipado: los prismáticos son fundamentales.
- White Hawk Birding (625 833 831).
03. Fundación NMAC (Vejer de la Frontera)
Miles de flamencos pueden sobrevolar su cabeza mientras usted contempla una imagen/performance de Marina Abramovic. En la Fundación NMAC-Montenmedio, abierta desde 2001 para impulsar la cultura más vanguardista en una zona periférica, el arte no puede entenderse sin la ubicación paisajística. Situada en un pinar junto al Parque Natural de La Breña, este centro de arte contemporáneo permite conocer obras de artistas como Maurizio Catellan, Olafur Eliasson y Sol Lewitt mientras usted se encuentra con animales como perdices o faisanes y plantas aromáticas como el tomillo y la mandrágora. “Invitamos a artistas a que dialoguen con el contexto social, cultural, paisajístico e histórico en el que nos encontramos”, cuenta Jimena Blázquez, la directora. “Estamos en un museo mediador. Nuestro compromiso es apoyar a los creadores contemporáneos en proyectos que fomenten el diálogo y el entendimiento de la sociedad a través del arte”. No es el único aliciente de la Fundación NMAC, ya que muchos de los artistas son reconocidos internacionalmente pero no han expuesto nunca en España, más que en esta dehesa de pinos y acebuches.
- Dehesa Montenmedio, Carretera N-340, km. 42,5. Vejer de la Frontera. 956 45 51 34.
- Horario, previa reserva: de martes a domingo de 10 a 14 horas y de 16 a 18.30 horas.
04. La Cabaña de Bolonia (Tarifa)
Tomarse un cóctel y ver el ocaso en La Cabaña de Bolonia es para muchos sinónimo de felicidad. También lo es para una gran cantidad de famosos patrios que se pasean por aquí cada verano en busca de alegría para el corazón. Sheila Santana, una brasileña de 43 años, es su gerente y conoce a la perfección la magia del lugar, cuya fuerza natural le enamoró desde el momento en que lo pisó, hace ya 18 años. La Cabaña abre a las once de la mañana para ofrecer desayunos y cierra a las dos o las tres de la madrugada con música en vivo. En medio, cocina mediterránea, brasileña y mezcla de ambas, como el atún encebollado con un toque del Amazonas, la moqueca (pescado en salsa con aceite de coco), el bobó (crema de gambas) y la carne de picanha. La puesta de sol y los ritmos brasileiros, blues o flamenco fusión caldean el ambiente. Uno se olvida hasta de sí mismo tumbado en la hierba, en las tumbonas o en la cama balinesa de este chiringuito construido a base de madera y cañizo. África nos mira de frente.
- Carretera del Lentiscal, Bolonia (Tarifa). 956 688 506, 620 208 404.
05. Restaurante el Campero (Barbate)
El atún rojo atrapa a quien lo prueba por primera vez. No se parece a ningún otro pescado. Este animal, capturado por el milenario arte de la almadraba, es uno de los bienes más preciados en el restaurante El Campero, en Barbate, convertido ya en una institución. Pepe Melero, su dueño, iba para controlador aéreo pero en 1978 se tuvo que hacer cargo de la pequeña tasca que regentaba su padre. “Y allí empecé a servir guisos de pescado y las partes supuestamente menos nobles del atún, como el morrillo, y también salazones”, recuerda Pepe. Desde 1994 regenta El Campero, donde la carta cambia cada año y donde se aprovecha cada una de las partes de este pescado. Ya sea en la barra o sentado, el local se llena siempre de gente pidiendo atún encebollado, morrillo ysashimi. La influencia del país nipón viene de los lazos que se crean con los japoneses que llegan hasta Barbate para exportar el atún. “Mezclamos la tradicional cocina marinera y la innovación. Aunque esto no es una cocina de autor. Yo me considero un artesano”. Es tal la fama de El Campero que recientemente ha abierto una tasca, La Taberna de El Campero, en Zahara de los Atunes. “Es una taberna marinera y sencilla con algunos toques creativos”. Uno puede pasear por el mundo en 10 minutos cuando prueba el tataki y luego los fideos con pez limón.
- Avenida de la Constitución, 5 C. Barbate. 956 43 23 00.
06. Hotel Arte y Vida (Tarifa)
Darse un baño en la playa, tumbarse en la hierba, tomarse un cóctel, bailar un rato, darse otro baño, pedirse otro cóctel… Y así en bucle. Es lo que hay que hacer en el hotel Arte y Vida, a las afueras de Tarifa, en la Ensenada de Los Lances. El chiringuito, abierto a todo el público y ubicado en la misma playa, es uno de los reclamos de este pequeño alojamiento con 11 habitaciones. A Nicolás Torreño, su encargado, no es fácil pillarle en un momento de respiro, pero cuando por fin se puede hablar con él presume de la atmósfera desenfadada y tranquila del lugar: “En todo momento suena una música chill-out que invita a estar de buen humor, a lo que ayudan los mojitos de fresa y regaliz y las caipiriñas”. Quien se quiera quedar a dormir ha de saber que la decoración es cosmopolita, a medio camino entre los colores intensos de la arquitectura latinoamericana y los detalles africanos y asiáticos. Y sobre todo hay que destacar la luz. Nos podemos fundir con ella almorzando justo delante del ventanal del restaurante, que se llama Miramar, con mucha variedad de platos, para que todos queden contentos, según Nicolás. “Puedes probar desde marisco o pescado de la zona hasta platos de pasta o tartar de atún”. La mayoría de los visitantes vienen a Arte y Vida a recargar pilas y disfrutar del entorno natural. Por eso el hotel tiene una pequeña escuela de surf y kitesurf y ofrece servicio de masajes. Sus mascotas también podrán disfrutar de este sentimiento de paz interior porque son más que bienvenidas.
- Carretera N-340, km. 79,3. Ensenada de Los Lances, Tarifa.
07. Hostal Reyes (El Palmar)
Los toques naranjas del restaurante del Hostal Reyes tienen el mismo tono que los atardeceres de El Palmar. Uno los puede comparar desde la terraza, al pie de la carretera y la playa, mientras cena. Pero hay que coger mesa pronto. Rosa Guerrero nació y vive en El Palmar y lleva 26 años cocinando para los demás. “Yo lo hago como si fuera para mí”, dice. “Como me enseñó mi madre”. Cada día está pendiente del pescadero, que va a la lonja de Conil y lleva luego a El Palmar todo el género fresco. La paella, el arroz con bogavante, el pescado como la dorada, la carne al toro, las croquetas de atún o corvina y las albóndigas son algunos de los platos más pedidos. Al igual que el flan y la tarta de queso. Antes Rosa pasaba mucho tiempo en la cocina, pero ahora le gusta pasearse por las mesas y ver las caras de felicidad de los comensales: “Y casi todo el mundo me dice lo mismo: qué buenas están las papas fritas. El secreto es papas de aquí, aceite de oliva virgen y sartén, nada de freidoras”.
- Avenida de la Playa, s/n. El Palmar (Vejer de la Frontera). 956 232 211.
08. Casas Karen (Los Caños de Meca)
En Casas Karen, en Los Caños pero al resguardo del bullicio, uno se reencuentra consigo mismo. Este complejo de 8.000 metros cuadrados y con 9 alojamientos defiende la naturaleza y un ritmo de vida slow. Su artífice es la belga Karen Abrahams, que conoció la zona cuando tenía 20 años y en 1988 compró una parcela a 800 pesetas el metro cuadrado. Allí recuperó las antiguas chozas, unas tradicionales viviendas construidas con paja, madera, cañas y cuerdas, que existieron en la zona hasta bien entrado el siglo XX. Uno se espera un alojamiento humilde, pero estas tres chozas tienen todas las comodidades y levantarlas cuesta casi lo mismo que una casa de ladrillos. “Son frescas en verano y muy fuertes. Antes teníamos la oficina allí, con los ordenadores, y no se cuela agua ni nada. Imagínate que aguantan hasta el viento de Levante”, matiza con una sonrisa Juani, una de las encargadas del complejo. A Casas Karen se viene a estar tranquilo y a disfrutar de la naturaleza, tanto de la playa como de los senderos por el Parque Natural de La Breña. Por supuesto los perros son bienvenidos. “Nuestra filosofía es de respeto por el medio ambiente”, continúa Juani. “Desde la pintura hasta el lavavajillas son ecológicos. Y no tenemos césped, sino el terreno natural”. Todo ello se completa con los mercadillos que se organizan los miércoles, donde uno puede comprar legumbres, verduras y frutas cultivadas de manera orgánica.
- Camino del Monte, 6. Los Caños de Meca. 956 437 067.
09. Restaurante Las Rejas (Bolonia)
No pasan ni 10 minutos y uno ya quiere ser amigo para toda la vida de Carlos, uno de los propietarios del restaurante Las Rejas, en la Playa de Bolonia (Tarifa), libre de construcciones, rodeada de vegetación y con una duna gigante. Carlos gana al personal con su gracia sin pretensiones y el pescado fresquísimo que sirve: “Aquí todo es grande: borriquetes, hurtas, salmonetes… Y las tortillitas de camarones son de verdad, no de las que te deprimen”. Junto a sus hermanos José y Cuqui regenta este local previo a la fiebre de lo vintage y han recogido el testigo de sus padres, que lo abrieron en 1986 con el mismo arte. “Predicamos el churrepeteo y el mojar pan. Aquí no utilizamos nitrógeno ni nada. Cómetelo todo como quieras, incluso te puedes manchar”. En la carta se llevan la palma el atún en manteca y encebollado (con tomate) y las croquetas de chocos, “pero con la tinta de verdad, no congelada, si no hay chocos del día no hay croquetas”. El menú también pasa por el arroz de marisco y de carabineros y las ortiguillas, con vinos ricos pero “a un precio para beberlo, no para guardarlo”. Las horas pasan mientras uno se recrea en la comida o en las vacas que pastan fuera, con los restos de la ciudad romana de Baelo Claudia como telón de fondo. Y con una buena selección de música, porque como asegura Carlos, “la tierra es redonda y un día nos vamos a Cuba, otro a Brasil y otro a Andalucía, porque ya que masajeamos bien el estómago, hagamos lo mismo con el cerebro”.
- Carretera El Lentiscal, Bolonia (Tarifa). 956 68 85 46.
10. Hoteles Arohaz y La Breña (Zahora y Caños de Meca)
Los bosques de pinos y el Cabo de Trafalgar protegen a estos dos hotelitos con encanto, de idéntica filosofía y mismos dueños. El hotel La Breña se ubica al final de Los Caños, protegido por los montes del parque natural homónimo. José Manuel Morillo fue el motor de este establecimiento, hace ahora diez años, donde uno puede descansar en alguna de sus siete habitaciones. Dormir y comer bien son las prioridades. “Nuestro cocinero, Ciprián Iordan, crea platos diferentes como el tataki y el sashimi de atún o el arroz y las croquetas a base de plancton marino, un ingrediente que ha puesto de moda el chef Ángel León, de Aponiente, en El Puerto de Santa María, del que somos amigos”, relata Morillo. Y como este hotel se queda pequeño cada año desde finales de mayo, sus gerentes decidieron abrir otro, Arohaz. Se encuentra a pocos kilómetros, en Zahora, con seis habitaciones y un gastrobar cuya carta ha sido elaborada por Mauro Martínez Barreiro, otro chef gaditano que ha conseguido una estrella Michelin. La pizza de calamares y la ensalada con pera y gorgonzola ya les suena a muchos. Y para bajar la comida, ambos hoteles ofrecen actividades como buceo, surf, paseos a caballo y la gimnasia energética de tradición china llamada Qi Gong.
- Hotel Arohaz. Calle Zahora (Zahora). 956 437 005, 667 315 050, 627 424 343.
- Hotel La Breña: Avenida de Trafalgar, Los Caños de Meca. 956 43 73 68.
11. An Ca Curro (Tarifa)
Cerca de la robusta Puerta de Jerez en Tarifa, en una callecita, aparece un templo de las tapas que no pasa desapercibido por las multitudes que congrega. Curro Santos tiene 54 años y lleva desde 1987 detrás de la barra de este bar pequeño y decorado con motivos taurinos y flamencos. Un bar de los de siempre donde lo que importa es la comida, y en concreto, el cerdo ibérico y la verdurita ecológica. “Aunque estemos en Tarifa, el pescado de aquí es de monte”, ríe Curro. En pleno Parque Natural de Los Alcornocales, en la Dehesa de la Peña, tiene una finca con unos 90 cerdos. “Y hago las matanzas y se aprovecha todo”. An Ca Curro abre de lunes a sábado de 19 a 24 horas, pero hay que llegar antes de las 21 para hacerse con un poco de sitio. Las estrellas de la casa son el jamón (cómo no), el salchichón, la caña de lomo, los chicharrones, el lomo en manteca, las costillas asadas, el solomillo, el secreto ibérico y los revueltos de tagarninas, quesillos (una especie de alcachofas) y berenjenas. Si viene de una gran ciudad, lo primero que ha de probar es el tomate con roquefort. Muchos se reencuentran con su infancia al saborear esta verdura roja como no hay otra. Y es inevitable la nostalgia.
- Calle Morena de Mora, 3, Tarifa, 658 854 012.
12. El Dorado (El Palmar)
El atardecer es el momento clave. Justo cuando el sol se está poniendo por el horizonte de El Palmar parece que el tiempo se detiene. Son sólo unos segundos. Luego se escuchan aplausos. Así es cada día. Santiago Saborido decidió abrir hace cinco años El Dorado para satisfacer a las hordas de urbanitas ansiosos por tomarse un cóctel en un chiringuitochill-out mientras el cielo se tiñe de naranja y rosa. La puesta de sol incluye todos los días banda sonora, con grupos en directo hasta las 3 de la madrugada que tocan desdereggae hasta flamenco, pasando por electro. Y si por estar tumbado en la arena se le ha montado algún músculo, se puede dar un masaje tailandés o de reiki. Paz no falta en El Dorado, que este año abre oficialmente el 14 de junio, aunque también estará operativo un par de fines de semana antes. “Nosotros lo denominamos un chiringuito de bienestar”, ríe Saborido, que también hace gala de la comida fusión que ofrecen. “Hamburguesas con carne de retinto (la ternera autóctona), sushi, burritos, nachos y ensaladas”. Para llenar el estómago entre daiquiri y gin tonic.
- Avenida de la Playa, s/n. El Palmar (Vejer de la Frontera).
13. El Mirlo (Punta Paloma, Tarifa)
Llegar hasta el chiringuito de El Mirlo, en Punta Paloma (Tarifa), es una aventura pero tiene su encanto. Desde Tarifa, hay que tomar la N-340 en dirección Cádiz. A unos 8 kilómetros se verá un desvío a la izquierda y luego habrá que seguir por la carreterita que serpentea a la duna. Al llegar a una zona militar, cuya barrera ya está levantada, se ha de seguir por el carril. La recompensa es una comida que no defrauda, un paisaje virgen y las vistas de África. Juan Chico y sus tres hermanos gestionan este chiringuito con decoración de cañas y aperos de labranza. Juan trabaja en la almadraba, así que es él quien trae el atún, y también tienen primos pescadores. “Por eso nuestro pescado es fresco. Tenemos una carta pero cada día ofrecemos lo que se ha capturado”, cuenta. Dejando a un lado el atún, el resto del pescado es blanco, de escama, como el borriquete -“no tiene mucha fama fuera de Cádiz pero a todo el mundo le sorprende su sabor”-, el pargo o la hurta. Los gambones, las cigalas y la albacora (una especie de túnido) alegran la mesa de un almuerzo o cena que puede salir a 20 euros por cabeza. Tranquilidad entre los carnívoros, porque también disponen de carne de la campiña gaditana. Y después del festín, lo mejor es bajar la cuesta e irse a caminar por la playa, donde se mezclan la arena, las rocas, los acantilados y alguna barca que espera para salir a la mar al día siguiente.
- Punta Paloma, Tarifa. 956 68 51 00.
14. Hotel Casa Blanco (Tarifa)
Su clientela es gente joven que aprecia el diseño. Casa Blanco es un hotelito de siete habitaciones con una decoración elegante sin resultar fría. Entre las fachadas blancas, de piedra y azulejos de Tarifa, surge este remanso de paz conocido como el Palacete de las Sendas, que hace años fue propiedad de la cantante Ana Torroja, pero que ahora gestiona la empresa Charming Places junto con el contiguo Hotel Misiana. De Casa Blanco los clientes destacan la comodidad de sus camas y el patio con lucernario donde poder tomar un café gratis o navegar por Internet. “Éste no es el típico hotelazo que te ofrece todos los servicios que quieras, pero sí es un hotel de autor, rodeado de historia y perfecto para escapadas románticas”, explica uno de sus responsables, José Luis Sánchez. Parte del encanto radica en la sugerente mezcla: los elementos mozárabes de la arquitectura palaciega, como la escalera y algunas ventanas, combinan con el diseño de vanguardia, como el cubo de cristal que hace las veces de baño en la suite premium. Desde el solárium se ven las azoteas y antenas de Tarifa. Para ver el perfil imponente de África hay que ir a la playa, pero tan sólo se encuentra a cinco minutos.
- Calle Nuestra Señora de la Luz, 2, Tarifa. 956 68 15 15.
15. Rutarifa
La playa no debería eclipsar la naturaleza del Estrecho porque es aún más espectacular. Detrás del mar empiezan los montes no sospechados y en Tarifa existe una asociación dispuesta a darlos a conocer. La crearon el año pasado un grupo de amigos treintañeros que trabajan en otros menesteres y a los que les gusta el senderismo. “Queremos que se valore este entorno y por eso organizamos rutas por caminos desconocidos incluso para los locales”, señala Diego Herrera, uno de los integrantes deRutarifa. Alternan los recorridos para adultos con los destinados a familias con niños y cuestan 3 euros por persona, dinero que se destina a los carteles de cada excursión y al documento con información sobre la historia, la flora y la fauna que ofrecen a cada uno al final de la jornada. Hay muchos paisajes por descubrir pero dos de los más sugerentes son el del Pinar del Guijuelo, cerca de Punta Paloma, con unas canteras romanas y formas rocosas misteriosas, y el Tajo de las Escobas, verdísimo incluso en verano por el Pico Luna, el punto más alto del Estrecho, con el llamado bosque de nieblas y la faz del Yebel Musa en Marruecos, donde supuestamente descansa una de las dos columnas de Hércules.
* Fuente: El viajero (El Pais)
Conservera de Tarifa en III Ruta del Atún de Tarifa
[title text=”Conservera de Tarifa en III Ruta del Atún de Tarifa“]
Conservera de Tarifa es una empresa dedicada a la elaboración de conservas de pescado artesanales, de atún, caballa y melva de Andalucía, siguiendo un método tradicional, desde hace más de 100 años. Este año, Conservera de Tarifa estará presente en la III Ruta del Atún de Tarifa, del 4 al 7 de Junio, como empresa colaboradora.
La empresa, abierta a las tendencias y oportunidades que surgen en nuevos mercados, fomenta el desarrollo de una vida sana y saludable. En en su Espacio Gourmet donde se celebran actividades y eventos gastronómicos, turísticos, culturales, educativos y deportivos.
Este año, Conservera de Tarifa, del 4 al 7 de Junio, ofrecerá una degustación gratuita de productos. El horario será el comercial: de 10:00 a 14:00 y de 18:00 a 20:00h. La dirección del Espacio Gourmet – Galería del Recuerdo y Tienda Tradicional es Calle Arapiles, 13 – 11380 – Tarifa (Cádiz). Telf.: 956 681 142.
Asimismo, Conservera de Tarifa ofrecerá sus tapas con conservas de atún, para el catering degustación que se dará en el Mercado de Tarifa, el jueves 4 de Junio, durante el acto de apertura de la III Ruta del Atún, y obsequiará con una cesta de regalo de sus conservas artesanales y tradicionales, a cada uno de los tres establecimientos que ganen la III Ruta del Atún de Tarifa.
La exposición “Un Estrecho de Conservas” llega al Castillo de Guzmán El Bueno de Tarifa
La exposición “Un Estrecho de Conservas” llega al Castillo de Guzmán El Bueno de Tarifa
Desde el 26 de Mayo hasta el 26 de Junio de 2017, la exposición fotográfica “Un Estrecho de Conservas: del garum de Baelo Claudia a la melva de Tarifa” podrá visitarse en el Castillo de Guzmán El Bueno de Tarifa. Esperamos vuestra visita en este espectacular entorno.
Qué puedes encontrar en la Exposición “Un Estrecho de Conservas”
El Castillo de Guzmán el Bueno acogerá la exposición fotográfica ‘Un Estrecho de Conservas: del garum de Baelo Claudia a la melva de Tarifa’, un repaso por la historia de las industrias de la antigüedad y de la gastronomía en la provincia de Cádiz.
A través de 26 pares de fotografías de gran formato realizadas por Juan Sebastián Vicente-Franqueira García y otros 16 fotógrafos e investigadores se comparan los procesos tradicionales de la industria conservera en Baelo Claudia, Tarifa, y de toda la zona del Estrecho de Gibraltar.
A la exposición va ligado un libro-catálogo, del mismo nombre, bajo el sello editorial de la UCA, que fue presentado por la UCA y el CEIMAR en junio de 2016. En la obra se han incluido una serie de estudios monográficos, obra del equipo de investigación de la Universidad de Cádiz dirigido por el profesor Darío Bernal. Estos textos forman parte de un proyecto general titulado ‘La economía marítima y las actividades haliéuticas en Baelo Claudia’ que profundiza en el tema y complementa a la muestra fotográfica.
La exposición ha sido organizada por la Consejería de Cultura, el Conjunto Arqueológico Baelo Claudia, la Universidad de Cádiz y Conservera de Tarifa, y ha contado con la colaboración de la Asociación de Amigos de los Museos de Tarifa. Anteriormente, la muestra de fotografías ya estuvo expuesta en el Museo del Conjunto Arqueológico de Baelo Claudia y en el Museo de Cádiz, con gran afluencia de público en ambas localizaciones.
Tosta crujiente de maíz, taquitos de tomate, melva de Tarifa y alioli de algas
Tosta crujiente de maíz, taquitos de tomate, melva de Tarifa y alioli de algas
El cocinero Jesús Recio de Valvatida de Vejer aporta esta combinación con algas para la colección Cocineros en Conserva, en esta receta de Receta de Tosta crujiente de maíz con melva de Tarifa.
Una tosta ha sido la creación del cocinero Jesús Recio, de Valvatida, de Vejer, dentro de la serie Cocineros en Conserva en la que profesionales de prestigio de la provincia elaboran platos con conservas de Tarifa. En este caso Recio, formado en la Escuela de Hostelería de Cádiz, ha utilizado melva de almadraba de la firma Piñero y Díaz.
Tosta crujiente de maíz, taquitos de tomate, melva de Tarifa y alioli de algas. Publicado el Viernes, Febrero 26, 2016 por Cosas de Comé.
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Ingredientes (para 4 tostas):
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– 2 obleas de las que se utilizan para elaborar fajitas mexicanas
– Aceite de oliva para freir las fajitas
– 1 tomate de Conil
– 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra
– Sal de salinas de la Bahía de Cádiz
– 2 hojas de albahaca
– Pimienta
– 400 gramos de mayonesa
– 50 gramos de lechuga de mar de Suralgas
– 1 diente de ajo
– 8 troncos de salicornia (espárrago de mar)
– 1 lata de melva de almadraba en aceite de 525 gramos de Piñero y Díaz
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Preparación:
- Paso 1: Primero hay que coger las obleas y partirlas por la mitad. De cada mitad cortar la masa que sobre hasta que quede un rectángulo. Poner aceite a calentar en una sartén y cuando esté caliente echar las obleas hasta que queden doradas y crujientes. Sacar del aceite, escurrir y dejar enfriar.
- Paso 2: El tomate de Conil se le quita la piel y se despepita. Entonces se parte a pequeños cuadrados, como si lo fueramos a utilizar para una piriñaca. Se pone en un recipiente y se aliña con la cucharada de aceite de oliva virgen extra, la pimienta, la sal y las dos hojas de albahaca bien picadas. Se deja reposar la mezcla a temperatura ambiente.
- Paso 3: Finalmente preparamos la mayonesa poniendo en el vaso de la batidora la mayonesa, el diente de ajo pelado y los 50 gramos de lechuga de mar. Si se puede adquirir el alga fresca se usa así, de lo contrario comprarla seca y seguir las instrucciones para hidratarla. Pasar todo por la batidora hasta que quede una crema homogenea. Reservar.
- Paso 4: Sólo queda ya abrir la lata de melva, partirla en lascas y escurrirla del aceite. Se monta el plato cuando se vaya a servir. Sobre cada rectángulo ponemos un poco de tomate aliñado y encima la melva. Decoramos por encima con el alioli de algas y un par de troncos de salicornia (espárrago de mar). Se sirve inmediatamente.
La propuesta de Jesús Recio combina melva de almadraba de Piñero y Diaz con una tosta de maiz crujiente, algas y tomates. Foto: Cosasdecome